miércoles, 21 de julio de 2010
Integrar nuestro saber con algunos medios de comunicación y las nuevas tecnologías
Las nuevas tecnologías juegan un papel de real importancia en la educación de nuestros tiempos, ellas se han convertido en algo aparentemente esencial, no únicamente para agilizar las cosas en el trabajo o en lo laboral, sino también para que sean integradas a los procesos de enseñanza y aprendizaje, con la aclaración de que no hay que verlas como una camisa de fuerza o como la panacea a los grandes problemas educativos que hoy existen.
Pienso que nuestras propuestas se viabilizan en la medida en que sea clara la existencia de múltiples modos de leer; no sólo se lee con los ojos, leemos con el cuerpo, leemos un libro pero también las imágenes, los espacios o el mundo. Así, podemos decir que el saber, se integra desde una mirada semiótica, pues aquí no sólo se habla de lectura sino también de comprensión, ya que si habláramos únicamente de la primera, estaríamos relegando la lectura y el aprendizaje al simple hecho de la descodificación.
Así mismo, es importante buscar que todo este proceso que integra el saber específico con los medios de comunicación y las nuevas tecnologías, constituya en los alumnos un aprendizaje significativo, es decir, que se integre a sus distintas experiencias de vida para que así exista una verdadera formación integral, ya que como lo dice Klafki:
“La tarea del didacta y del educador es buscar y explotar entonces los contenidos formativos, es decir, aquello verdaderamente importante y de peso que hay en un contenido y hacerlo parte de la enseñanza”
Teniendo en cuenta lo anterior, creemos que nuestra propuesta puede llegar a ser que exista un verdadero aprendizaje, porque con las nuevas tecnologías en conjunto con los medios de comunicación, se puede lograr una materialización de la creatividad imaginativa del lector, es decir que haya una conexión entre texto-imagen-objeto.
Un ejemplo de lo anteriormente mencionado, es cuando leemos un libro y luego podemos observar todas esas imágenes que hemos creado en nuestro imaginario, conformadas o plasmadas en una película o en internet , aclarando aquí que muchas de esas imágenes en numerosas ocasiones nos decepcionan, pero hay otras que simplemente nos dejan atónitos, esto sin querer entrar en la vieja polémica de si el texto impreso es mejor que la película o viceversa, puesto que nuestro propósito es mostrar la importancia de esta relación de los saberes específicos con las nuevas tecnologías y dejar claro que es inherente al ser humano apropiarse y reconocer las nuevas construcciones que van haciendo parte del contexto.
El diálogo; fundamental dentro del proceso educativo
Las preguntas son fundamentales cuando se quiere construir un pensamiento divergente, es decir, un tipo de pensamiento que tenga en cuenta otras perspectivas de análisis, claro, apoyándonos en las nuevas tecnologías se hace fundamental que nosotros como docentes propiciemos, entre los estudiantes, un diálogo mucho más concienzudo, donde se tenga una visión crítica y propositiva sobre los diferentes estímulos que se pueden encontrar dentro de nuestro medio. Como se expone en el tercer Módulo del Mutitaller: Modelos de comunicación y modelos de aprendizaje, la comunicación es un poner en común, un expresarle al otro, donde primero hay una prealimentación; aquí cada una de las personas recoge, reflexiona y expone a los otros sus apreciaciones y elaboraciones, luego viene lo que hemos llamado la retroalimentación y aquí es donde el otro desempeña un papel fundamental, pues deja su posición pasiva para llegar a interactuar y a aportarle a los otros. Este proceso interactivo es fundamental cuando estamos hablando de educación, pues en el mundo no estamos solos y lo que hace realmente creativo al otro es esa posibilidad de encontrarse con las múltiples posturas y apreciaciones que recibe de los otros que tienen diferentes experiencias y hacen parte de contextos diversos.
Por eso, nuestro proyecto llamado “Leamos, escuchemos y discutamos”, precisamente busca mejorar este aspecto, con él se pretende fortalecer el diálogo entre los mismos estudiantes, partiendo de experiencias presentes en sus contextos y de inquietudes que ellos mismos puedan tener. Hemos pensado en dilemas y discusiones éticas, entendiendo la ética como esa capacidad que cada sujeto tienen para reflexionar sobre sus propias actuaciones, además este tipo de actividades pueden resultar muy productivas pues por medio de ellas aprendemos a escuchar al otro y a respetar las posturas que éste tenga.
El diálogo, y la comunicación dialógica en general, son el primer paso para pasar de la educación bancaria y manipuladora a la educación liberadora o transformadora que lo que busca es formar personas autónomas que se piensen dentro de un contexto y busquen las mejores condiciones para mejorarlo.
Es fundamental que todos los docentes pensemos en fortalecer un modelo educativo diferente, uno donde el estudiante se piense como agente activo de transformación, como un sujeto que puede influir el medio y obviamente como sujeto determinante de su propio proceso formativo, aquí se hace necesario promover una visión amplia, donde se analicen los sucesos partiendo de posturas disímiles y se llegue a conclusiones que mejoren las condiciones contextuales de la comunidad.
Por eso, nuestro proyecto llamado “Leamos, escuchemos y discutamos”, precisamente busca mejorar este aspecto, con él se pretende fortalecer el diálogo entre los mismos estudiantes, partiendo de experiencias presentes en sus contextos y de inquietudes que ellos mismos puedan tener. Hemos pensado en dilemas y discusiones éticas, entendiendo la ética como esa capacidad que cada sujeto tienen para reflexionar sobre sus propias actuaciones, además este tipo de actividades pueden resultar muy productivas pues por medio de ellas aprendemos a escuchar al otro y a respetar las posturas que éste tenga.
El diálogo, y la comunicación dialógica en general, son el primer paso para pasar de la educación bancaria y manipuladora a la educación liberadora o transformadora que lo que busca es formar personas autónomas que se piensen dentro de un contexto y busquen las mejores condiciones para mejorarlo.
Es fundamental que todos los docentes pensemos en fortalecer un modelo educativo diferente, uno donde el estudiante se piense como agente activo de transformación, como un sujeto que puede influir el medio y obviamente como sujeto determinante de su propio proceso formativo, aquí se hace necesario promover una visión amplia, donde se analicen los sucesos partiendo de posturas disímiles y se llegue a conclusiones que mejoren las condiciones contextuales de la comunidad.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)